Escritoras contemporáneas

Entrevistas a escritoras realizadas por estudiantes de Hunter College

Rosa Montero

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Página web de Rosa Montero

Para leer la lista de preguntas, pulse aquí.

1. En su obra, El peligro de estar cuerda, usted toca el tema de las tragedias personales y como eso influye en el proceso de escritura. En cierto modo, pareciera que la creatividad está conectada con las tragedias; como si para crear y escribir un libro hubiese que desempolvar recuerdos trágicos, incluso despertar monstruos dormidos en el subconsciente. ¿Puede haber creación literaria sin tragedias? 

2. A medida que la humanidad evoluciona, hace descubrimientos básicos para la subsistencia de la especie. Por ejemplo, descubrimos el fuego, cómo mantenerlo y eventualmente, generarlo. ¿Cree usted que la escritura es una necesidad evolutiva del ser humano? 

3. Para usted, escribir es su válvula de escape; se podría decir que a usted escribir la ha salvado. Pero no solo se trata de escribir, sino también publicar, porque al dar a conocer una obra al público, el artista busca aceptación. ¿Y qué pasa si la obra no es bien recibida? Es como si la medicina tuviese un efecto contrario; ¿no le da miedo?  

4. ¿Cómo logra poner límite a una novela? ¿Cómo evita perderse en un océano de ideas que se encadenan unas con otras infinitamente?  

5. Mientras escribe una novela, ¿a quién le da prioridad, a Rosa Montero la mujer que necesita escribir lo que esta imaginando, o al lector que busca entrar en el mundo de Rosa Montero?  

Para leer la entrevista en español, pulse aquí.

RM-[…] Como digo en el peligro de estar cuerda, la obra nace del dolor de perder. Pero estoy completamente en contra de ese tópico que dice que para ser artista hay que sufrir mucho y que entonces pues bueno, el artista, la imagen del artista torturado y tal y cual. Y que las grandes obras nacen del sufrimiento. Pues no. Es decir, sí nacen del sufrimiento, pero no de un sufrimiento, de una pérdida, por lo tanto, de un duelo, por lo tanto, de un sufrimiento, pero no de un sufrimiento excepcional, sino del sufrimiento básico de la vida. Quiero decir que en la vida del hombre o la mujer más felices que puedas imaginarte, o sea, tú imagínate, por ejemplo, la persona más feliz del mundo, la más feliz del mundo. Bueno, pues incluso en la vida de esa persona, la más feliz de la tierra, hay suficiente sufrimiento con sólo la idea de su propia muerte y la idea de la muerte de los seres queridos que es inevitable. Con eso ya hay suficiente sufrimiento como para escribirte una biblioteca entera. O sea, que no, no necesitas más tragedia que la que la esencial y básica tragedia de vivir.

RM-[…] Es una grandísima pregunta. Interesantísima. Yo creo que el arte creo que el arte es absolutamente esencial y una necesidad en la evolutiva, en el ser humano. No lo creo yo solo pues, por ejemplo, hay una neuróloga neurocientífica española que se llama Mara Dieren, que sostiene esto mismo, no, que el arte forma parte del proceso evolutivo, no? Y de aprendizaje, pero luego el arte son muchas cosas. No es solo la escritura, es decir, la narración oral alrededor del fuego. Eso era arte también. Así que la escritura, desde luego, ha sido absolutamente esencial para crear la civilización que hoy tenemos para, para guardar el conocimiento, para poder transmitir el conocimiento a otras generaciones. Pero puedo concebir que haya otras civilizaciones, que hubiera otras civilizaciones en otros planetas que consiguieran conservar ese conocimiento de otra manera. Yo qué sé, bordando, ¿no? Con una especie de borrado de puntos, como los ordenadores, no de dos puntos y b un punto, no que fueran capaces de albergar el conocimiento. No, no sé. Quiero decir que el arte, desde luego, sí que es evolutivo. y que a nuestra civilización y a nuestra a nuestra civilización. La escritura ha sido absolutamente esencial para nuestra civilización. Pero quizá pues puede haber otras civilizaciones que no humanas, no humanoides. Podría haber habido muy interesantes tus preguntas, querida Juliana.

RM-Pues mira, para mí escribir no es que sea una válvula de escape ni que me haya salvado. Es más que eso. Es decir, escribir es forma parte estructural de lo que yo soy. Como la mayoría de los novelistas, empecé a escribir de niña. Como digo en el libro Mis primeros cuentos los escribí con cinco años de ratitas que hablaban entonces, desde que me recuerdo como persona, me recuerdo escribiendo En la base de mi construcción como persona está la escritura. Parafraseando a Monterroso, podría decir que cuando desperté a la vida, la escritura ya estaba ahí. Así que es más que una válvula de escape. Y más que una salvación, es exactamente lo que me permite vivir. Forma parte esencial de lo que soy, no? Y efectivamente, todo arte es en primer lugar, comunicación. Así que si no consigues comunicarlo, si no consigues que te lean o que te escuchen tus composiciones o que vean tus cuadros. Pues entonces tiene que ser tremendamente amargo y tremendamente enloquecedor y rompedor de tu estructura vital. No, La historia de la literatura está llena de ejemplos de autores que perdieron. Yo qué sé, la posibilidad de editar, que los editores los dejaron de lado y que efectivamente, se volvieron locos o se suicidaron o hicieron de su vida un disparate, ¿No? Pero bueno, la cuestión es que es que es que no. Bueno, es comunicación y puede ser una comunicación más moderada. Es decir, puede que te baste con que te lean cien personas con que te lean tus amigos. A lo mejor con eso te vas. Está con que tengan tus amigas y te digan que que les gusta y que eso les hace algo. Pues a lo mejor con eso te basta. No, hombre, te basta. Serás más desgraciado y es durísimo, pero con eso te basta. En cualquier caso, no te lo planteas antes de que te suceda ese rechazo porque escribes porque necesitas escribir, no puedes, no puedes no escribir. Entiendes?

RM-Pues también es verdad. Tienes toda la razón. Aparte de que todos los novelistas somos obsesivos y perfeccionistas y te puedes pasar pelando un adjetivo y cambiando un punto de lugar. Hay una parte preciosa en el libro del amor y de la oscuridad, de Amos Oz. Hay como un par de páginas muy graciosas en donde dice Amos Oz, dice la gente se cree que lo importante para hacer una novela es pensar la trama, desarrollar los personajes y tal. Pero dice, pero en realidad lo que más tiempo te lleva y lo que más zozobra te produce es pues de repente saber empezar a poner en un párrafo poner entra por la puerta azul, le pongo azul o no le pongo color, le quito la palabra, el adjetivo azul o o lo pongo de otra manera o pongo un punto y aparte y lo pone, lo quita y se pasa como dos páginas amos hoz, poniendo y cambiando un párrafo para luego terminar dejándolo exactamente igual. Y es verdad, no? Entonces es cierto que te podrías quedar, eh? Envidiada ahí y sin acabar nunca. Pero sabes? Es que la escritura es lo. más parecido que he encontrado a la pasión amorosa, al amor. Te enamoras de la novela, estás vibrando con ella.Estás ocupada con ella toda la cabezallena de esa historia y llega un momento en donde de repente ya has trabajado tanto en ella. Estás dándole tantas vueltas que que empieces a asfixiarte y hartarte. Es como cuando se acaba un amor y normalmente, cuando estás terminando una novela y todo va bien, que estás en un periodo tan creativo que se te ocurre la siguiente y entonces empiezas a tener la emoción, empieza a bascular hacia la siguiente, se empieza a ir hacia la siguiente y entonces llega un momento en donde quieres terminar esa, acabar esa sacarla, librarte de ella y ponerte entregarte a los brazos amorosos de la nueva novela.

RM-Fíjate que la pregunta quinta no le das prioridad nunca al lector. Sabes porqué? Porque bueno, lo primero la novela, como he dicho, es todo arte es comunicación y las novelas desde su mismo momento en que nacen. Está el lector ahí porque la novela nace a mí por lo menos me pasa. Yo creo que nos pasa a todos cuando de repente, sin saber por qué. Porque las novelas son como sueños que se sueñan con los ojos abiertos y de repente se te ilumina en la cabeza una idea como un sueño aparece por la noche con la misma autonomía aparente con que un sueño aparece por la noche en tu cabeza? No. Entonces se te ilumina una imagen o una idea que de repente te emociona tanto que te turba tanto que te inquieta tanto que te intriga tanto que no te cabe en el pecho y no te cabe en la cabeza. Y entonces te dices yo esto tengo que contarlo, Tengo que compartirlo, no? Así que ese es eso. Yo lo llamo el huevecillos, el huevecillos y es el comienzo de una novela, así que desde el mismo comienzo, pues está el lector, evidentemente, es decir, está ese deseo de contar ese deseo de compartir. Pero por otro lado, como es algo tan íntimo como es un proceso tan ya te digo tan tan en relación directa entre tu inconsciente y tú porque el yo consciente tiene que borrarse. Tú tienes que convertirte en una médium y dejar que esa historia te atraviese, pues es un proceso tan íntimo que no puedes desarrollar y vivir y caminar por ese proceso tan íntimo, tan interior, tan irracional, tan, tan, tan inconsciente. No puedes caminar pensando en los lectores. Eso mataría el proceso, lo agotaría, lo acabaría. Así que mientras escribes una novela, piensas en la lectora que llevas dentro porque lo escribes intentando escribir el libro que te gustaría leer. Así que piensas escribes para la lectora que llevas dentro? Y cuando terminas la novela, pues ahí sí, ahí ya de repente caen sobre ti todos los lectores. Es decir, cae sobre ti el deseo tremendo y voraz de tener un montón de lectores. No oye muy buenas tus preguntas. Un beso muy grande y perdón por la tardanza en contestarte.

To read the interview in English, please click here.

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